Los adultos poseen las mayores tallas de las especies de mosca blanca presente en Canarias. Su par de alas anteriores son completamente blancas y sin manchas alares oscuras. La hembra realiza las puestas en el envés de las hojas en forma de líneas espirales con aspecto ceroso y blanquecino. Los huevos son oblongos, sentado y colocado de forma tendida sobre el sustrato vegetal. El cuerpo de las pupas presenta un color amarillento, aunque la colonia completa presenta una apariencia oscura dada las copiosas cantidades de cera blanca, adornada con gruesas bandas en espiral de cera.

Sudamérica.

Región Neotropical (Colombia, Ecuador, Perú) y Paleártica (España: Islas Canarias)

Alteraciones en la estructura de la vegetación.

En las especies hospedadoras provoca la pérdida de color y forma de sus hojas, que de prolongarse sus efectos produce un debilitamiento progresivo hasta la total destrucción de la planta. Ataca principalmente en primavera y verano, aunque en plantas de interior pueden actuar a lo largo de todo el año. La melaza favorece la aparición de una capa fumagina, la cual reduce la actividad fotosintética produciendo una falta de vigor en la planta. A diferencia de sus parientes más cercanos, no transmite enfermedades de origen viral.

Sobre hábitats afectados Fitófago (hojas, semillas, raices, etc).

Tanto adultos como los estados inmaduros causan daños directos sobre las plantas debido a su alimentación. Al tratarse de una especie polifagia causa graves daños en una gran variedad de plantas de interés agrícola y ornamental (tanto por su valor comercial como por su aspecto estético en parques y jardines).

En la isla de Canarias durante el siglo XX

En la isla de Canarias en el área de Agricultura con una introducción vía Contaminante.
En la isla de Canarias en el área de Horticultura y jardinería con una introducción vía Contaminante.