Prácticamente toda la isla de El Hierro, La Palma, La Gomera, Tenerife, Gran Canaria, Fuerteventura (incluyendo Lobos), Lanzarote y archipiélago chinijo (Roque del Este, Graciosa, Montaña Clara y Alegranza).

Se trata de un ave propia de ambientes xéricos. Es abundante en amplias zonas del piso basal, ocupando el matorral de tabaibas. También es común en cultivos, e incluso en jardines y zonas periurbanas. Penetra en malpaíses siempre y cuando exista un desarrollo adecuado de la vegetación. En altitud llega hasta el matorral de alta montaña, faltando únicamente en las masas forestales, aunque puede observarse entonces en claros y zonas taladas donde se desarrolla un tapiz de matorrales. Los nidos son ubicados a muy poca altura, en general a menos de 1 m, y a veces en el suelo. En ocasiones llega a criar en el interior de invernaderos. Es posible que realice movimientos altitudinales después del período reproductor llegando a claros de bosques de monteverde y pinar. (Matín, A. & J. A. Lorenzo, 2001)